Consejos Para Una Alimentación Sana
1. Desayune todos los días. Las personas que desayunan son menos propensas a comer demasiado durante el resto del día. El desayuno también le proporciona energía y le ayuda a comenzar el día de una manera saludable.
2. Escoja granos integrales con más frecuencia. Pruebe los panes y pastas integrales, la avena, el arroz moreno o el bulgur (trigo entero precocido).
3. Coma todos los días una variedad de vegetales de todos los colores. Los vegetales de diferentes colores proporcionan diferentes nutrientes. Escoja los de hojas verdes oscuras como la espinaca, el brócoli, los ejotes y el berro. Seleccione los vegetales rojos y naranjados como las zanahorias, los pimientos rojos y los tomates.
4. Seleccione frutas frescas. Prefiéralas a los jugos o refrescos, ya que éstos casi siempre contienen mayores cantidades de azúcar agregada.
5. Use poca cantidad de grasa y aceite. Los aceites de oliva, canola y maní (cacahuate), los aguacates, las nueces y las mantequillas de nuez, las aceitunas y el pescado tienen grasas saludables para el corazón además de vitaminas y minerales.
6. Coma pocos dulces. Limite los alimentos y bebidas que tienen mucha azúcar añadida.
7. Coma tres comidas todos los días. Si omite una comida o la reemplaza con un refrigerio, es posible que coma demasiado más tarde.
8. Tenga a mano refrigerios bajos en grasa y en azúcar en su casa, en el trabajo o cuando esté corriendo de un lado al otro. Le ayudarán a combatir el hambre y prevenir comer demasiado después. Estos refrigerios pueden ser frutas, rodajas de pepino, zanahoria o tomate, yogurt reducido en grasa o barras ricas en fibras.